Es muy bonito al otro día encontrar mi bici donde la dejé.

1 comentario:

José Ignacio dijo...

Y sin duda es más bonito encontrarla 20 días después, donde menos te lo hubieras imaginado y tras haberla dado por robada...
Claro, esta sola experiencia refuerza esa sensación de belleza de hallarla donde se debe.
(Sí, me he metido al blog)