Buenos días 2pm

Me está costando trabajo dormir y no sé qué hacer. Mientras resisto al sueño me digo que no gano nada lamentándolo en exceso con un plan más o menos como el siguiente: no me permitiré aceptar la situación. No, no y no. Sobre la cama, sin embargo, no me rindo tan fácil a un plan tan pelele. Y es que tampoco veo con qué pretexto se casaron sueño y horarios. Se supone que el sueño es para disfrutarlo y descansar, no para arrastrarlo y defenderlo como a un inválido. Por casualidad, al despertar leí lo siguiente:

"Then he would pull the blankets over his head and sink deeper into his own warmth and let the friendly darkness swallow him up. He could almost pretend he did not exist. But he knew he would have to force himself out. The whole world agreed it was Tuesday. The earth itself, hurtling through cold space, spinning and revolving around the sun, had brought everyone to Tuesday and there was nothing Peter, his parents or the government could do to change the fact... How cruel it was then to drag his warm dozy body from its nest and grope for his clothes". 

Pero ese día Peter descubre un cierre en el pecho de su gato William, por el que sale su alma de gato y entra la suya de niño de diez años. Por un día, Peter puede disfrutar de verdad del sueño. 

Yo hoy voy a salir también en un cuerpo extraño, porque para la calle necesito parecer ser alguien que ha dormido algo.   

Mi trauma del sueño favorito (como espectador): SOMNILOQUIA 

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