Boda fracaso







Tenía las coordenadas para llegar a la boda de Verena como pistas para un rally. En uno de los trenes me apendejé y el resultado fue que a Badenweiler llegara dos horas tarde a la boda. Encontré el lugar de la ceremonia subido en lo más alto de un parque-balneario, donde todo ya había acabado. Pétalos tirados hace muy poco y nada más. Nadie. Con un mameluco envuelto para regalo en la mochila, volví a atravesar la Selva Negra ahora hacia arriba para llegar a emborracharme con urgencia. Y eso sí fue un gran éxito.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

tus aventuras!
mis favoritas.

abraham palafox dijo...

:)
dorian me platica de ti
me dice que eres un buen chico
saludos jaja

Rita Ponce de León dijo...

todos te adoran, ¿te has dado cuenta?

etrescolectivo dijo...

saludous